Por: Sandra Guerrero
@SamiGuevlez
En lo que va de este 2021 el peso colombiano registró una devaluación del 11.59%, dejando atrás divisas extranjeras fuertemente golpeadas por crisis políticas como Argentina con un 11.32% de devaluación de su moneda o Turquía que tuvo que enfrentar la crisis del precio del petróleo logrando que su divisa perdiera un 11.35% de su valor, tan solo en el primer semestre de este año.
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Como si fuera poco, el pasado 10 de agosto el dólar en Colombia superó la barrera de los $4.000 COP, cifra que preocupó a importadores y alentó a exportadores de productos como el café y las flores, pero más allá de eso hay una constante en estas variaciones de precios, alzas de tarifas y déficit de flujo de caja por parte del gobierno nacional, y es la consolidación de la política de seguridad y defensa que el presidente Iván Duque trazó como eje clave de su gobierno.
Reforzar el poder militar en Colombia es tan importante para el actual gobierno y para la nación en sí, que más allá de la crisis social y económica que afronta el país la única constante de “crecimiento” e inversión que se mantiene fija es la del Ministerio de Defensa.
Aquí algunos datos:
1. El Gobierno plantea una reforma tributaria para recolectar dinero y con ello garantizar la compra de 24 aviones caza F-16 Bloque 70 a Lockheed Martin, los cuales costarán $4.500 millones de dólares, unos $14 billones de pesos colombianos.
2. Policía Nacional inició el pasado mes de julio la implementación de un plan piloto que contempla el cambio de uniformes de 140.000 hombres y mujeres que integran la institución, mencionado plan da respuesta a la resolución N.8912 del 11 de diciembre del 2018 del Ministerio de Defensa Nacional, y aunque no se ha verificado el costo real que tendría el contrato, portales web y asesores de seguridad aseguran que éste podría superar los 80 mil millones de pesos.
3. ARC aumenta poder militar de sus guardacostas en el Caribe, mediante comunicado a la opinión pública el comandante de la Armada de Colombia, almirante Gabriel Alfonso Pérez Garcés informó que la institución contrató con la Corporación de Ciencia y Tecnología para el Desarrollo de la Industria Naval Marítima y Fluvial, Cotecmar, la construcción de dos unidades navales de reacción rápida, categorías Safe 65 y 41 respectivamente, el contrato tendrá una duración de 10 meses y un valor estimado de 6.8 millones de dólares.
4. Ejército Nacional firmó contrato por 1,9 millones de dólares para el mantenimiento de 19 de los 183 vehículos tácticos, referencia HMMWV- M1152, M1097A1 Y M988 que esta fuerza tiene, firmado el pasado 15 de septiembre este contrato demuestra una vez más la simbiosis entre la industria estadounidense y el gobierno colombiano, pues aunque estos carros fueron comprados varios años atrás, jamás se negoció la transferencia de tecnología o el suplemento de dotación logística haciendo con ello que a largo plazo valga más su mantenimiento que el vehículo mismo, y es que este contrato se realiza en el marco del proyecto LOWEL el cual tiene por fin dar mantenimiento y actualización de sistemas integrados en los tácticos HMMWV creado por la empresa AM General LLC.
5. La Fuerza Aérea Colombiana, FAC, comprará 24 aviones de entrenamiento Texan II T-6C, la inversión que supera los 230 millones USD, tiene como objetivo reemplazar los vetustos modelos T- 37B con los cuales desde los años 70 la fuerza realiza los entrenamientos de sus pilotos… Lo polémico del contrato es que expertos en seguridad, pilotos de guerra e incluso oficiales retirados y activos lo han criticado, ya que la nueva flota aérea carece de motores turbojet y capacidad moderada de ataque tierra y combate aéreo, características elementales para este tipo de recursos militares, hay quienes incluso afirman que este contrato se hizo más a conveniencia y gusto de cierto grupo de oficiales de insignia que de necesidad de la misma fuerza.
Lo triste y complejo de todos los contratos aquí relacionados, no es el dinero invertido, ya que en su mayoría son inversiones requeridas por la Fuerza Pública y dotan de poder disuasivo al estado colombiano, sino la incapacidad de éste y los gobiernos anteriores incluso el de Uribe reconocido por tener una línea dura en temas de seguridad, de generar una poderosa industria militar sea pública o privada.
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Los países altamente industrializados como Alemania, USA, UK, Francia, India, China, poseen a su vez una poderosa capacidad militar, aérea, naval y terrestre, saben que a partir del desarrollo de tecnologías y el alivio de cargas tributarias se fomenta la libre empresa, la generación de empleo y la sana competitividad, estos países hacen del sector privado el aliado número uno para el sector defensa, estimula la creación propia de ciencia y tecnología militar y consolidan sus rangos de acción en terreno con manufactura nacional, haciendo de sus creaciones armamentistas, productos apetecibles de transacciones comerciales multimillonarias que garantizan el flujo de capitales en sus países, aportando para que la economía se mantenga a flote.
Colombia sigue teniendo como “aliado” comercial- militar a los Estados Unidos- Israel y Francia, desplazando de tajo la posibilidad de realizar acuerdos comerciales con países como China, Rusia o la India quienes han demostrado la superioridad de producción industrial militar y la reducción de costes… Parece ser que a los presidentes y ministros de defensa colombianos, les parece chévere comprar más caro y si es gringo mejor, “lo que sea con tal de tener a sus amigos contentos”, no importa que el peso colombiano se devalúa con la velocidad que toma una paleta en derretirse en pleno verano, para eso están las clases sociales 1,2,3 que soportan el 87% del costo del presupuesto anual.