Una fuerte reacción generó el anuncio del Gobierno Nacional de retomar la aspersión con glifosato en la lucha contra los cultivos de uso ilícito.
Diferentes organizaciones sociales y campesinas del Cauca rechazaron el decreto de aspersión por precisión, y convocaron a movilizaciones en todo el país.
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Para la Asociación de Trabajadores Campesinos de Cajibío, ATCC, es necesario establecer un diálogo y concertación con las comunidades que se han acogido a los planes de sustitución voluntaria.
La Coordinadora Nacional de Cultivadores de Coca, Amapola y Marihuana, Coccam, cuestionó el decreto presidencial 380 del 12 de abril del 2021, pues atenta contra la salud de los habitantes y el medio ambiente.
“Esta es una burla con las comunidades más vulnerables del departamento del Cauca y el país”, aseveró Deivin Hurtado, integrante de la Federación Nacional Sindical Unitaria Agropecuaria, Fensuagro.
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Las organizaciones cuestionaron que el Gobierno Nacional calcule el costo de la aspersión en $1.800.000 por hectárea, cuando en el año 2018, las autoridades sostuvieron que el costo era de $72.000.000.
